Una junta de oficiales de la Dirección Cibao Central de la Policía Nacional y fiscales adjuntos investigan la muerte de un paramédico, cuyo cadáver se encontró en una habitación de la Unidad de Control de Cáncer de Santiago.
El cuerpo sin vida de Juan Antonio Vargas, de 40 años de edad, fue levantado por el médico legista y enviado al Instituto Regional de Patología Forense de Santiago para fines de autopsia.
Informes preliminares revelan que el paramédico podría haberse suicidado, pero las autoridades dijeron que hay que esperar los resultados de la autopsia para determinar la causa real de su muerte.
Algunos de sus familiares y amistades dijeron que el occiso estaba deprimido porque tenía problemas de salud, por lo que no se descarta que se haya suicidado.
Uno de los oficiales que participa en las investigaciones, dijo que tratan de determinar si Vargas murió por muerte natural o se suicidó.
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